La sección Tierres en Trance (que recibe su nombre a modo de homenaje al film fundacional dirigido por Glauber Rocha en 1967), pone énfasis en que la coyuntura social, política y económica, de América Latina, en conflicto perpetuo, ha permitido un estado de permanente renovación de formas y narrativas en una parte del cine de esas latitudes. Un cine que, como ya sucediese en los años 60 y 70, es joven, rompedor y de urgencia, del aquí y del ahora. Un cine independiente por convicción e imposición del entorno, desde ciertos márgenes, los responsables de un discurso sofisticado y genuino que resuena e influye de manera decisiva en todo el planeta.
